Los Comederos Inteligentes Hook que están hoy a disposición del campo argentino, son el resultado del trabajo conjunto del INTA y nuestra empresa, de pura tradición familiar. Luego de años de investigación y ensayos realizados en la Estación Experimental Agropecuaria Anguil, este desarrollo permite evaluar el consumo individual y el comportamiento de cada animal, basado en identificación electrónica, sensores e internet.
YA SON MÁS DE 100 COMEDEROS INSTALADOS EN LA REPÚBLICA ARGENTINA
La eficiencia de conversión de alimentos en los bovinos tiene una correlación positiva con aumento del tamaño adulto, de manera que la selección por este rasgo conduciría a un aumento del tamaño, una relación no deseada en nuestros sistemas de producción. Debido a este motivo se propuso otra forma de evaluar la eficiencia alimenticia denominada “Consumo Residual de Alimentos”, en ingles RFI ( Residual Feed Intake), la cual es independiente del nivel de producción y del tamaño del animal. El Consumo Residual de Alimentos (RFI) es estimado como la diferencia entre el consumo observado del animal y el consumo que se esperaría que tenga para su ritmo de ganancia y peso metabólico. Los animales con un menor Consumo Residual de Alimentos (RFI) son más eficientes que animales con un alto (RFI), dado que han llegado al mismo peso con un consumo menor, en el mismo período de tiempo. El Consumo Residual de alimentos (RFI) mide grupos contemporáneos que se alimentan durante un período de tiempo bajo condiciones controladas, durante un período alrededor de 70 días, utilizando exclusivamente los Comederos Inteligentes Hook. Durante estos 70 días se registra el consumo de alimentos y la evolución del peso, genotipado y mediciones ecográficas.
1. COMEDEROS - 2. INSTALACIÓN DE LOS COMEDEROS - 3. INSTALACIÓN ELÉCTRICA Y WIFI - 4. ANIMALES
5. CORRALES - 6. PERÍODO DE PRUEBA - 7. MANEJO DE LA INFORMACIÓN - 8. INSTALACIÓN DE LOS COMEDEROS
1. COMEDEROS
Dimensiones en plano adjunto. El peso de cada comedero es de 140 KG. Si la venta es dentro del país, el transporte de los mismos no requiere embalaje y el flete es a costo del comprador. Caso contrario de acuerdo al destino y al tipo de transporte se cotizará oportunamente.
El equipo es robusto, pero se debe tener cuidado con las celdas de carga y sus cables, el indicador, el panel lector y las barreras que indican el ingreso y egreso del animal. Como todas estas partes poseen cables, los roedores son una amenaza como así también si se utiliza en algún momento hidrolavadora para limpiar los comederos, lo cual no es aconsejable. Las celdas de carga (balanza) de cada comedero son muy sensibles a movimientos o desplazamientos laterales. No deben golpearse o someterse a movimientos de lado. Debe también evitarse golpes y deformación de los emisores y detectores de infrarojo, ubicados en la cara del corral de cada comedero. El haz infrarojo es el que detecta la presencia del animal, lo comunica al sistema y determina el peso inicial del comedero, descontando el consumo cuando el animal se retire del mismo.
Si el comedero esta conectado a una red WIFI, la sincronización de los datos con el servidor es a cada minuto. En caso que por algún motivo no haya WIFI los indicadores tiene una memoria de 6000 registros que almacenaran las pesadas hasta que se recupera dicha conexión y se sincronice nuevamente. La recolección de datos es continua y se suma al final del día para cada animal, pero se almacena todo dato de evento de consumo. El almacenamiento de los datos se produce en el Indicador HooK AT 457 y se envía al servidor web de HooK, también puede almacenarse la información en un computador en el mismo sitio y u otro que el dueño del comedero asigne.
El comedero funciona con 12 VC, el conector de la alimentación del comedero se ubica sobre la bacha a 1.40 metros del piso. La alimentación de 12 V se puede lograr con baterías recargables con paneles solares, o con conexión a la red de CA de 220 V, utilizando un transformador de 220 V a 12 VC, en este caso se aconseja tener UPS que garantice la entrega constante de energía. El cliente deberá resolver como llegar hasta cada uno de los comederos. Puede hacerlo desde el techo colocando ya sea un toma eléctrico colgado que provea corriente de 12 VC directamente o bien 220 V, Hook provee una fuente de 220 V a
12 VC.
La balanza sale calibrada de fabrica y el comedero tiene una capacidad máxima de 200 kg. La división mínima es de 50 gramos. Al momento de decidir la ubicación de los comederos, por tratarse de balanzas de precisión con alta sensibilidad,
se ven afectadas por los vientos. La recomendación es minimizar el choque de viento sobre los comederos. Se deberá prever un piso a nivel ya que es vital que el comedero quede bien nivelado y fijado al piso. Las antenas lectoras de caravanas son claves para el funcionamiento de los comederos. La vinculación del consumo con el animal es el punto central de la herramienta. La antena debe detectar al animal y asignarle el consumo instantáneo. Como son emisores electromagnéticos es fundamental que no se interfieran entre sí. De allí, la distancia necesaria entre unidades (comederos). La cercanía entre la antena y la caravana en la oreja del animal es muy importante. Esa distancia ideal debería no ser mayor a 30 cm en algún momento del acto de consumo. El sistema detecta el acceso de un animal por el corte de haz infrarrojo en la cara interna (hacia el corral) del comedero y luego, al detectar la caravana se le asigna ese evento de consumo. Si las antenas lectoras no detectan la caravana y el animal consume, ese consumo no es asignado a animal alguno y se subestima el consumo del animal que accedió.
El encendido por primera vez es manual, en lo sucesivo si se interrumpe el suministro eléctrico el indicador se enciende automáticamente al recuperar la energía. La verificación del funcionamiento se hace por la plataforma del sistema.
Se recomienda llenar al menos dos veces por día los comederos, fundamentalmente con dieta húmeda. Todo dependerá de la cantidad de animales asignados a cada comedero, el tamaño de los animales y la Materia Seca de la dieta. El llenado de los comederos debe ser prolijo y limpio. Son balanzas sensibles y no deben golpearse las partes. Tampoco deben sobrecargarse ya que el desborde de comida lleva a registrar pérdidas que no tienen asignación a un animal y se distorsiona la gestión de control de carga y retiro de alimento.
Limpiar al menos una vez por semana . Son enemigos del sistema el derramamiento de la comida al cargar los comederos ya que la misma en contacto excesivo con la bacha producirá alteración en el pesaje. Debemos mantener limpio el sector de alimentación y sobre todo en los costados y alrededor de cada comedero, debajo de éstos, etc. Nuevamente, durante el proceso de limpieza debería realizarse con cuidado para no golpear involuntariamente los comederos.
Se recomienda el uso de sopladores a efectos de limpiar la zona donde se encuentran los mismos
La distancia entre los comederos depende de la eventual interferencia de las antenas electromagnéticas lectoras. De acuerdo a su posición y tipo de antena, los comederos pueden estar más o menos cerca entre sí. Ello depende de las especificaciones del tipo de comedero, de acuerdo a instrucciones de la empresa.En plano adjunto enviamos una sugerencia de instalación pero en realidad dependerá de lo que el cliente disponga para alojar los mismos. Lo recomendable es una separación de 1,5 metros entre ellos.
Ver plano adjunto. Los comederos deberían instalarse sobre una platea de cemento o piso, de al menos 3 m de ancho. El espacio a ocupar por comedero, en sentido transversal a la platea, ocupa 1 m y se requiere de 1,5 m del lado del corral y al menos 0,50 m del lado de la calle de alimentación para dar espacio a la limpieza. Si la calle de tránsito de la alimentación fuera también piso de cemento o consolidado, sería mejor para evitar encharcamiento, barro y movimientos excesivos de mixer u otro implemento de alimentación que pudiere golpear a los comederos.
Dada las características del sistema y la sensibilidad de los equipos, se recomienda colocarlos bajo techo, sobre una platea de hormigón. De esta forma se protegen de la lluvia u otros eventos. El agua atenta no solo contra la calidad de la comida sino también deteriora y expone a los componentes eléctricos y electrónicos, afectando su vida útil.
El comedero debería fijarse a la platea de cemento con tornillos tirafondo de buen tamaño o mediante brocas según plano adjunto, para evitar el movimiento de los mismos o en su defecto facilitar el traslado y reubicación de ser necesario.
El consumo estimado de corriente que necesita cada comedero para trabajar es de 1000 MA a una tensión de trabajo 12 V continua.
Se recomienda que todo el sistema posea energía ininterrumpida ya sea UPS o pantalla solar con baterías. Considerando el consumo de cada comedero el cliente deberá calcular el back up energético para asegurar la provisión de corriente en forma constante.
Dependerá del tipo de instalación eléctrica, pero como mínimo se debe proveer energía de calidad con protecciones contra cortocircuito o descarga eléctrica.
Se require una zona WIFI estable sin cortes en donde la cobertura incluya a todos lo comederos con un nivel de señal medio/alto. In situ se deberán hacer pruebas de distancia de las antenas WIFI para lograr la provisión con un buen nivel de señal con el equipamiento adecuado.
El peso mínimo recomendado 250 kg. en el caso particular de determinación de Consumo Residual de Alimento (RFI), los animales deberán ser individuos en pleno crecimiento y sería recomendable ya que hayan alcanzado la pubertad. Se debería evitar que se mezclen animales pos púberes con pre púberes. En este sentido, animales que superan el año de edad en razas británicas o los 18 meses en razas índicas, estarían en condiciones de ser evaluados. La prueba de RFI es independiente del peso de los animales pero deberían evaluarse animales de similar dinámica del crecimiento y en activo crecimiento para evitar diferencias sustantivas en composición de la ganancia, o eficiencias diferenciales en aumento de peso debidas al estado fisiológico o estudios del desarrollo. Las consideraciones serían las mismas para hembras.
Se recomiendan 6/8 animales por comedero dependiendo el tamaño de los animales y la frecuencia de llenado. Para el éxito de una prueba de RFI, la cantidad mínima de animales sería de 45 a 50, dependiendo ello de la homogeneidad en peso y edad de los mismos. El cálculo de consumo residual (RFI) se basa en la regresión múltiple lineal dentro del mismo grupo, por lo que la robustez de la misma o sea su valor estadístico dependerá de la cantidad de individuos y su dispersión. Si a cada comedero se asignaran 8 animales y se contara con 6 comederos, la prueba tendría 48 animales, número con el que se podría generar una ecuación de regresión significativa estadisticamente. Por supuesto la calidad de la ecuación se incrementa cuando la cantidad de animales supera sustancialmente ese número.
Requiere caravanas electronicas (pueden ser las caravanas oficiales, pero no es imprescindible) ubicadas en la oreja izquierda. Las caravanas que se utilizan en los dispositivos actuales son del tipo pasivo de baja frecuencia. Deben sin embargo, tenerse en cuenta las recomendaciones de la empresa proveedora de las mismas. Deberían instalarse del lado izquierdo del animal mirado de atrás (lado de montar) pero ello se ajusta respecto de la posición de la antena lectora de caravana. La posicion de la antena ha cambiado de acuerdo a la experiencia. Actualmente la posición de la antena es arriba y hacia el lado izquierdo del acceso al comedero.
Depende la zona del país donde se encuentren, pero se sugiere un mínimo de entre 20 y 50 m2 por animal, influyendo el tipo de suelo, la pendiente, el regimen de lluvias, etc. El número de animales por comedero se sugiere sea de 8 o menor. Entre los argumentos, el principal es la capacidad de reabastecer cada comedero ya que cuanto más animales tienen que acceder a un comedero la cantidad de alimento que se remueve es mayor. Por otro lado, la competencia por acceso puede limitar el el consumo de los animales menos agresivos y ello afectar significativamente la voluntad de consumir o que algunos animales coman residuos o remanentes de lo que dejan otros. Los corrales podrían tener 2 a 4 unidades comedero. En el caso de 4 comederos por corral, ello implicaría hasta 32 animales por corral con acceso a esos 4 comederos indistintamente. Un corral de mayor cantidad de comederos y consecuentemente de animales es factible en la medida en que el grupo sea homogéneo y el efecto manada no exacerbe el bulling. Se recomienda evitar grupos grandes, de más de 40 animales por corral. Por otro lado, más de un corral sirve para reducir el impacto de algún desperfecto o funcionamiento errático de algún comedero u otro imprevisto. En la práctica, 3 corrales de 3 comederos cada uno, con 24 animales, sería más útil que uno de 72 animales o dos de 36. Dependiendo de la zona donde se ubique el ensayo, por ejemplo zonas con mayor humedad requieren mas metros cuadrados por animal. Entiéndase que esta estructura requiere de generar la mayor comodidad posible a los animales, aspecto que depende más de la condición del piso del corral que de la superficie disponible. Es importante que la superficie sea suficiente para que los animales puedan desplazarse con comodidad, sin incomodarse entre ellos por espacio. Se debería evitar que todo el piso fuera de cemento. Solo el área de consumo, para evitar efectos del cemento sobre las pezuñas y la dureza del mismo sobre las articulaciones.
Los corrales deben ser secos y permanecer secos, el barro debería evitarse en todo momento porque afecta directamente el consumo voluntario. En ese sentido, el piso de platea de cemento y el techo sobre los comederos asisten en mantener esos sitios secos y accesibles. Sería conveniente que el piso del lado de los animales tenga una pendiente hacia el corral de un 3% o sino un escalón de 8 a 10 cm a 50 cm desde el límite del comedero ( no esta en el plano) para que los animales puedan pararse de frente al comedero cómodamente pero que el desnivel desestimule a estar parado de lado, paralelo a la línea de comederos. Las ¨gateras¨ o barras transversales, a los lados de cada comedero, ayudan a evitar la posición de los animales que boqueen acceso y también a evitar que un animal desplace fácilmente de un comedero a otro.
Se recomienda la instalación de sombras, tipo techo de chapa o de media sombra, alta (3.5 m) con proyección pensada sobre el lado posterior del corral, que no se solape con el área de comederos. Se intentará que la sombra se convierta en el lugar de comodidad de los animales. Que éstos tiendan a buscar la sombra como refugio y no el área de comederos. Generalmente con 1,5 a 2 m2 de sombra por animal sería suficiente si se piensa la proyección más que la cobertura efectiva del área. Si se trata de media sombra, se debería pensar con interrupciones cada 4 m longitudinales que permitan escapar al viento, evitando que el viento las destruya.
La cercanía a instalaciones de manejo es muy valorable ya que se debe pesar a los animales al inicio, a la mitad y al final de la prueba. Incluso, al inicio y al final se recomienda doble pesada consecutiva para promediar el par de días asignando así un peso medio de inicio y final a cada animal más confiable.
Pero, las instalaciones contiguas a las de manejo no serían convenientes por la distracción que provoca el uso de corrales. Por otra parte, si se están evaluando toros y en los corrales de manejo se está trabajando con hembras, la perturbación del comportamiento y del consumo sería excesiva. De la misma manera, todo movimiento de carga, descarga o manejo de animales perturbará la rutina ingestiva. Sería recomendable una separación de al menos 100 m entre los corrales de evaluación de RFI y los corrales de manejo.
Las instalaciones deben prever una circulación cómoda del equipo de alimentación, mixers, carro, etc. y no combinarse con el sistema de alimentación de un feedlot comercial porque los tiempos, momentos y dietas serán distintas, como también el grado de precisión del suministro del alimento. El sitio debe tener disponibilidad de energía eléctrica, por línea o por generación in situ (del tipo solar o generador a combustión), pero es central que sea confiable y tenga sistemas de respaldo como batería o fuente alternativa para que no se interrumpa el suministro. El sitio debe tener acceso a conectividad (WiFi, o internet) para generar flujo de datos en forma continua y el monitoreo remoto de funcionamiento de los equipos en forma continua.
El bebedero debe instalarse por corral o compartido por corral, alejado del área de comederos para evitar congestión. Al igual que el área de comederos, el de bebederos debería ser cementada, limpia y permitir un acceso cómodo. Si los animales tienen dificultad en acceder al agua también tendrán dificultad para consumir. El consumo de agua limita el consumo de alimento. No debe restringirse la disponibilidad de agua.
La circulación de los animales debe realizarse por la parte posterior de los corrales, del lado opuesto de los comederos. Evitar el contacto de los animales con la calle de alimentación. Tranqueras y tranquerones se deberían poner del lado posterior a la calle de los comederos para no interferir en ningún momento con éstos. Sería útil sin embargo, tener tranqueras o tranquerones que comuniquen corrales del lado lateral para el caso en que se quieran comunicar o vincular dos corrales entre sí, o reubicar animales.
El período de acostumbramiento de 15 días es necesario para adaptar los animales al sistema de comederos. El acostumbramiento podría tener dos etapas, una de recepción de aproximadamente una semana en un corral de grupo sin los comederos electrónicos y luego pasar al corral de los comederos. En la primera etapa se hace recepción y acostumbra los animales a la dieta y al lugar, en el segundo se acostumbran a los comederos y al nuevo corral. Al ingreso al corral de comederos electrónicos, se comienza a medir el consumo pero se descartan en los cálculos finales los primeros 7 días de medición. La experiencia indica que para que los comederos operen adecuadamente no deben sobrecargarse de alimento y tampoco dejarlos descargarse por debajo del 20% del peso de alimento que pueden cargar, pero al momento del suministro debe mezclarse el remanente con el nuevo alimento y una vez por semana limpiar previo a la recarga con alimento nuevo.
Los aumentos de peso mínimos tolerables serían aquellos que permiten expresar efectos genéticos o cuya expresión fenotípica no se vea condicionada por la digestión de la dieta, o sea que no se esté evaluando calidad de dieta más que respuesta genética animal. En ese sentido el rango entre 1 a 2 kg/día sería el adecuado para estas evaluaciones. Las experiencias realizadas en Argentina hasta el momento indicarían que el promedio del grupo debería ubicarse cerca del 1,5 kg/d o superior, sin superar en los animales de mayor potencial los 2 kg/d o reflejar un engrasamiento excesivo. Se debe notar que la evaluación por RFI no es una competencia por aumento de peso o eficiencia de conversión. Se relaciona a estos indicadores, pero no debería estar condicionado por el primero. Por ello, animales que aumentan por debajo del promedio pero que comen por debajo del consumo esperado para ese nivel de aumento de peso, podría ser un animal de muy buen RFI (negativo).
Las ganancias máximas no tienen realmente techo mientras las dietas no se conviertan en dietas de alta energía de las de tipo feedlot de engorde, de alto grano. El riesgo de alimentar con dietas de alta energía no está mayormente en el nivel de engorde o el efecto sobre el RFI, sino sobre las condiciones del engrasamiento temprano de vísceras, órganos reproductivos, movilidad, producción de semen, calidad de semen, y el compromiso ruminal para readaptarse al pasto si el toro regresa al ambiente pastoril. Esto es similar en hembras, cuyo sobre engrasamiento y rúmen convertido a procesar granos, complica la adaptación de estos animales al planteo pastoril. Asimismo, vacas excesivamente gordas tienen problemas reproductivos.
Las pesadas de animales deber realizarse con mucha prolijidad y precisión. Sería conveniente la doble pesada al inicio y al final de la prueba para remover efectos de llenado sobre el cálculo de aumento de peso vivo.
Las determinaciones ecográficas de área de ojo de bife y espesor de grasa dorsal son independientes del sistema determinación de RFI clásico pero se incorporan en las determinaciones de RFI corregido por engrasamiento. Ello corrige por composición inicial de carcasa y composición de la ganancia.
Las determinaciones ecográficas se pueden realizar al final, a la mitad o al inicio y final de la prueba para promediar estas previo a incorporarlas al cálculo de RFI corregido por EGD.
La experiencia y el protocolo internacional de prueba de RFI indica medir consumo durante 60 días al menos. Generalmente se sugieren 70 días de medición para descartar 10 que pudieren ser días de datos comprometidos por eventos incontrolables. Ese período es el conveniente además como diferencia entre pesajes de los animales para reducir el efecto de desbaste o llenado de los animales sobre el cálculo de aumento de peso. Las diferencias de llenado pueden condicionar a la calidad del dato de aumento de peso si se utilizan períodos cortos de días entre pesadas. A los 70 días habría que sumarle los 15 días de acostumbramiento para tener una referencia de duración total de una prueba.
Las dietas de RFI son del tipo de las de acostumbramiento de engorde a corral. No son de alta energía o alto grano. Son dietas de 2.0 a 2.2 Mcal/kg MS de energía metabolizable y deben asegurar un nivel de fibra efectiva del 30% para evitar cambios de pH ruminal que acidifiquen el rumen. Las dietas en base a heno de alfalfa con agregado de un grano como maíz, cebada, avena, sorgo y complementadas con un concentrado proteico serían las indicadas. En ese contexto deberían ofrecer al menos 15% de proteína bruta, cubriendo el requerimiento de animales intactos (enteros) en rápido crecimiento, con una expectativa de aumento de peso de 1,5 kg/día. Ese nivel de aumento de peso no será el máximo posible de los toros sino un nivel que permite expresar efectos genéticos asociados al consumo, sin exponer al sobre-engrasamiento temprano y las consecuencias del mismo sobre los toros. Se asimila además a dietas de base fibrosa como los ensilajes o situaciones de pastoreo de pasturas de alta calidad. En este sentido, dietas con 40% de heno de alfalfa, 30% de grano de maíz partido o cebada aplastada, 20% de concentrado proteico, vitamínico y mineral y pelleteado, serían dietas comunes a estas evaluaciones. En el caso de dietas húmedas, la base puede ser el ensilaje de maíz, complementado con el concentrado proteico y grano quebrado molido, dependiendo de la cantidad de grano en el ensilaje y la expectativa de aumento de peso. Es muy importar el mezclado, la homogeneidad de la dieta todo el tiempo. Incluso, la limpieza de los comederos es importante, para evitar la acumulación de olores indeseables y procesos de putrefacción. Esto es particularmente importante en las dietas basadas en ensilajes. Para el comienzo de la experiencia de evaluación de RFI sería recomendable hacerlo en base a dieta seca (henos, granos secos).
Debería muestrearse periódicamente (semanalmente o ante ajuste de dieta e ingredientes) el alimento cargado en los comederos para ajustar por materia seca y poder describir adecuadamente el alimento consumido por los animales.
Debería evitarse el uso de alimentos poco convencionales o subproductos de alta variabilidad en calidad y palatabilidad.
Un componente importante para la gestión del uso de los comederos lo constituyen las alertas incluídas en el software disponible. Estas alertas están disponibles ingresando a la plataforma que se entrega con los comederos, mostrándose en forma de reportes, gráficas y colores.
Los corrales deben ser secos y permanecer secos, el barro debería evitarse en todo momento porque afecta directamente el consumo voluntario. En ese sentido, el piso de platea de cemento y el techo sobre los comederos asisten en mantener esos sitios secos y accesibles. Sería conveniente que el piso del lado de los animales tenga una pendiente hacia el corral de un 5% o sino un escalón de 8 a 10 cm a 50 cm desde el límite del comedero ( no esta en el plano) para que los animales puedan pararse de frente al comedero cómodamente pero que el desnivel desestimule a estar parado de lado, paralelo a la línea de comederos. Las ¨gateras¨ o barras transversales, a los lados de cada comedero, ayudan a evitar la posición de los animales que boqueen acceso y también a evitar que un animal desplace fácilmente del comedero a otro.
El Software on line en la página web de Balanzas Hook S.A.
La distancia entre los comederos depende de la eventual interferencia de las antenas electromagnéticas lectoras. De acuerdo a su posición y tipo de antena, los comederos pueden estar más o menos cerca entre sí. Ello depende de las especificaciones del tipo de comedero, de acuerdo a instrucciones de la empresa.En plano adjunto enviamos una sugerencia de instalación pero en realidad dependerá de lo que el cliente disponga para alojar los mismos. Lo recomendable es una separación de 1.5 metros entre ellos.
Ver plano adjunto. Los comederos deberían instalarse sobre una platea de cemento o piso, de al menos 3 m de ancho. El espacio a ocupar por comedero, en sentido transversal a la platea, ocupa 1 m y se requiere de 1,5 m del lado del corral y al menos 0,50 m del lado de la calle de alimentación para dar espacio a la limpieza. Si la calle de tránsito de la alimentación fuera también piso de cemento o consolidado, sería mejor para evitar encharcamiento, barro y movimientos excesivos de mixer u otro implemento de alimentación que pudiere golpear a los comederos.
Dada las características del sistema y la sensibilidad de los equipos, se recomienda colocarlos bajo techo, sobre una platea de hormigón. De esta forma se protegen de la lluvia u otros eventos. El agua atenta no solo contra la calidad de la comida sino también deteriora y expone a los componentes eléctricos y electrónicos, afectando su vida útil.
El comedero debería fijarse a la platea de cemento con tornillos tirafondo de buen tamaño o mediante brocas según plano adjunto, para evitar el movimiento de los mismos o en su defecto facilitar el traslado y reubicación de ser necesario.
Duración: 1 año contra defectos de fabricación.
Alcances, la garantía cubre el repuesto y la mano de obra, no así el flete.
Restricciones, todo lo que no sea defecto de fabricación, dado por el mal uso o instalación de los mismos.
Garantía extendida: disponible con un abono a partir de la finalización de la garantía.